
Malas decisiones económicas que tienes que evitar
¿Ha ocurrido en algún momento que ha optado por un razonamiento de elección relacionado con el dinero, era el correcto y después de un tiempo comprendió que no estaba en lo cierto?
Sorprendentemente, es innegablemente más típico de lo que podríamos sospechar.
Las malas decisiones monetarias causan resultados no deseados.
El problema es que muchas personas no entienden el error hasta que se supera el punto de no retorno.
Para condensar, a continuación comentamos cuatro opciones monetarias extremadamente terribles y rutinarias que debe evitar sin importar qué.
Absolutamente nunca se tomen estas decisiones financieras
Compra una casa que no puedas soportar
La compra de una casa es una de las opciones financieras más importantes que haremos en nuestras vidas.
No en vano, vendimos nuestro futuro concediéndonos al reembolso de una gran cantidad de efectivo que no tenemos hoy.
Además, en caso de que no lo hagamos, tendremos problemas.
Numerosas personas se contraen pensando en la medida del gasto de mes a mes. En caso de que esa cifra se ajuste a usted, el préstamo hipotecario y la compra de la casa también se coordinan.
El problema es que para entender que la cifra es moderada, extienda la cuota del préstamo hipotecario durante 30 o 40 años y pase por alto el riesgo de que los dividendos en obligaciones se multipliquen por sí mismos.
Por lo tanto, la casa termina costando significativamente más de lo que parece.
Por ejemplo, para un préstamo hipotecario a 40 años de 180,000 euros con un entusiasmo normal del 4%, terminaríamos pagando 361,098 euros. De hecho, simplemente doble. ¿Asombrado?
Renovar mucho tu vehículo.
Otra opción errónea y muy normal relacionada con el dinero es recargar de vez en cuando el vehículo.
Los vehículos pierden un incentivo después de un tiempo, un gran número de personas optan por transformarlo cada 4 o 6 años para mantener el incentivo restante de la tienda en cero.
Por así decirlo, buscan «ganarle» al viejo vehículo con el objetivo de que puedan comprar otro vehículo.
El problema es que pasan toda su vida pagando la obligación del vehículo. Por favor, se transforman en un costo fijo de mes a mes, un costo que debería haber sido extraordinario y conveniente.
Recuerda lo que te contamos una vez: es culpa de tu vehículo que aún seas pobre.
No empieces a ahorrar lo antes posible
Hay personas mayores de 30 años sin tener un solo euro ahorrado. Incluso hay quien vive tan al día que la crisis de los 40 con la cuenta corriente pasa al mínimo.
Esto es un error y una irresponsabilidad muy seria. Vivir sin ahorros significa vivir con una sola nómina de personas sin hogar.
Las excusas para no guardar son varias. Desde «Soy milurista y mi salario no da más» a «Tengo muchos gastos debido a los niños» o «Todavía es temprano, ahorraré cuando pasen unos años».
Todas son excusas fruto de la poca cultura del ahorro que hay en nuestro país.
No saber realizar la gestión del día a día
Dejamos para el final el error más común de todos: la gestión económica deficiente en el día a día.
Hay personas que no saben exactamente a dónde va el dinero.
Llegan a la tercera semana del mes y se preguntan, ¿qué ha pasado con mi dinero?
En este caso, no estamos hablando de una sola mala decisión económica, sino de un conjunto de pequeñas decisiones económicas que se toman diariamente y que hacen que la economía familiar sea un desastre.
Para evitar que esto suceda, dos trucos: anote cada uno de sus gastos y haga un presupuesto mensual. No hay mas